El historiador y docente del colegio Luis Amigó, Pedro del Guayo, fue uno de los principales impulsores de los actos de recreación histórica con motivo del 600 aniversario del Privilegio de la Unión. Nuestro compañero contó con la colaboración, entre otros, de Darío Español, doctor en Historia Medieval y didáctica de la guerra en la Edad Media, docente de la Universidad de Zaragoza y director de HP Lab, empresa de recreadores vinculada con el citado centro universitario y que vertebra a varios grupos a nivel nacional.
El jueves 7 de septiembre en la sala de armas de la Ciudadela se llevaron a cabo dos charlas que llevaban por título “Vestir el poder. El vestuario noble en el siglo XV” y “Las mujeres navarras y el poder en la Baja Edad Media”. El viernes 8 de septiembre en la plaza Consistorial se realizó la firma del Privilegio de la Unión. Antes de comenzar, los dos narradores, Darío Español y Pedro del Guayo, (debidamente vestidos con los ropajes de la época) explicaron al público del acto y todos los que se desarrollarían a lo largo del fin de semana. En primer lugar fueron presentados los procuradores de la Navarrería, de San Cernin y de San Nicolás, quienes salieron del ayuntamiento portando sus respectivos escudos. Acto seguido subió al escenario el rey Carlos III. Los tres alcaldes pasaron a la mesa de la cancillería (dispuesta en el otro extremo), donde cada uno de ellos firmó en representación de su universidad así como el heraldo real en nombre del rey. Tras la firma salió al escenario un hombre de armas portando el nuevo escudo de Pamplona y se leyó el capítulo XV del Privilegio de la Unión donde se hace referencia a la creación del nuevo emblema de la ciudad, dando así por terminado el acto.
Los eventos del sábado día 9 comenzaron a las diez de la mañana con la apertura al público del campamento de recreación y de los espacios de Historia Viva, ubicados en la zona del Redín y en la ronda Barbazán. Por la tarde, a las seis y media, se realizó en la catedral la coronación del rey Carlos III. El espacio donde se desarrolló el que podría considerarse como uno de los actos más emotivos de ese fin de semana, fue la nave central, junto al sepulcro del rey y de la reina. Con un despliegue de medios enorme y de gran calidad, se congregaron en la seo un buen número de recreadores que dieron vida a los del ayer y a su ceremonial.
El domingo 10 de septiembre fue el último día de los actos de recreación en el baluarte de Guadalupe donde se celebraron torneos a caballo que permitieron entender a los allí presentes cómo eran esas competiciones. La recreación constaba de varias fases en las que participó el rey Carlos III y en las que salió victorioso de todas ellas.
¡Enhorabuena, Pedro! Has hecho un trabajo magnífico haciendo del 600 aniversario del Privilegio de la Unión un evento inolvidable.
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